Las aventuras en el planeta azul

Policarpio haciendo sus investigaciones se ha topado con esta producción literaria que relata las historias de distintas personas en la Montaña Espacial en Walt Disney World.

Ha sido pues una sorpresa para Policarpio al ver que una de las tantas historias envolvían a su Padrino el Conde de la Lagunita Nelson Osíx Rodrigeur, su primo Nene Alberto Letuan Osíx Croix y al propio Policarpio.

Así pues cuenta la historia que en un caluroso día en Orlando, Florida, Policarpio convenció a su Padrino y primo de disfrutar de la maravillosa Montaña Espacial con lo cual comenzaron la larga y tortuosa cola para poder montarse en la atracción. A lo largo de la cola Policarpio notó como en repetidos letreros había advertencias acerca de los peligros que se corrían al montarse en la Montaña Espacial y comenzó a atormentar a su Padrino recordándole que ahí no se podían montar personas con problemas cardíacos, presión alta, problemas de espalda o cuello, nerviosos, cansados, comelones y demás.

La cola avanzó y finalmente llegó la hora de subirse en el bólido espacial, los tres incautos obedecieron las instruccciones no sin antes escuchar una dulce voz por los parlantes que recordaba que cualquier tipo de problema físico podía desencadenar en una tragedia al subirse en esta atracción.

De esta forma Nene, Nelson y Policarpio fueron lanzados a toda velocidad a la masa de tubos, rieles y gritos que constituyen la Montaña Espacial, de aquí para allá, de allá para acá en aquel viaje interminable por la oscuridad, después de 1 minuto y medio dando vueltas el pequeño Nene quien ya hablaba español comenzó a tratar de entablar una conversación con el algo asustado Nelson, Policarpio alcanzó a escuchar que Nene hablaba de Mickey, del Pato Donald, de lo mucho que le gusta la mantequilla de maní y hasta de como Andreíta habia logrado sacar de los rieles a los carritos en otra atracción en Disney. El Conde Nelson quien entre la sugestión producida por los constantes recordatorios de Policarpio acerca de los peligros de subirse en la infernal montaña espacial y la velocidad del carrito que les transportaba no se encontraba en el momento más lúcido de su vida se limitó a contestarle al pequeño Nene "Hijo, en este preciso momento no me encuentro en condiciones de entablar una conversación seria contigo"...como si se tratara que el pequeño Nene había preguntado a su Padre por la razón de la Guerra Fría o que le explicara la Teoría de la Relatividad.

Finalmente sanos y salvos se bajaron de la atracción y el Conde Nelson juró más nunca subirse a una montaña rusa si Policarpio se encontraba a 10 Kilómetros a la redonda y el pequeño Nene entendió que Mickey y Donald son tan serios como cualquier otra cosa en nuestras vidas...